Hace más de año y medio soporté un profundo proceso de aprendizaje personal con un intenso episodio de lucha de poder por el control de una empresa.
Aunque logramos mantener el control de la compañía, tanto la entidad como varias personas sufrimos enormemente. El «asalto al poder» trajo una considerable cantidad de guerra sucia, interna y externa. Algunos salimos con varias puñaladas en la espalda.
Colaboradores y amigos me han insistido durante todo este tiempo en trasladar lo ocurrido, y en algún caso sacarle a más de uno los colores. Sin embargo, por mi naturaleza, me interesa más tratar de destilar lo aprendido y compartirlo.
El libro «¡Traición!:10 cosas que aprendes cuando te apuñalan por la espalda» tardará aun en publicarse, así que voy a avanzar algunos temas en esta y futuras entradas, esperando que sirvan al menos para la reflexión. No oculto que tiene también una parte de proceso «terapútico» personal después de lo sufrido.

Mis 10 aprendizajes son los siguientes:


1) El 98% del común de los mortales somos buena gente, pero la mala gente existe. Y es capaz de ir más allá de lo que te puedas imaginar. Tu mente no está acostumbrada a funcionar en ese modo así que te sorprenderá la inexistencia de límites para ciertas personas por conseguir sus propósitos.

2) Hay 3 tipos de personas: los que están a tu lado cuando hay un problema, los que te dejan de lado cuando llega el problema y los que te menten en problemas. Buena parte del éxito en la toma de decisiones y la gestión del cambio consiste en distinguirlas.

3) Mantén el timón firme en su rumbo en tiempos de tempestad. Es agotador pero tu organización lo agradecerá cuando pase la tormenta.

4) Para poder hacer lo anterior tienes que tener claro cual es tu rumbo. Se fiel a la misión de tu organización y utilízala como filtro para la toma de decisiones.

5) Mide si tus fuerzas están a la altura de tus valores. Cuando hay una lucha de poder con mala gente por medio el tema va a ser duro de verdad.

6) No le regales gasolina a un pirómano. Hay veces que se tienen identificados los pirómanos en la empresa, pero el día a día hace que tengan acceso a las cerillas y lleguen a puestos relevantes.

7) Si estás en un puesto que te permite tomar decisiones aplica la regla del 3:

  • uno) Si alguien te pone palos en las ruedas una vez, reflexiona. Analiza los motivos y habla directa y claramente con la persona responsable.Todos merecemos una segunda oportunidad, y las inercias son muy fuertes en las organizaciones. Pero piensa también que la primera vez será culpa suya y la segunda es ya tu responsabilidad.
  • dos) Si te obstaculiza una segunda vez, pasa al número tres.
  • tres) No dejes que te ponga palos en las ruedas una tercera vez. Despídelo.

8) La transparencia juega de tu parte. Si la gente no tiene información se la va a inventar, pero tienes que saber diferenciar entre sinceridad y sincericidio.

9) Déjate ayudar. No puedes soportar la presión tu sólo. Siempre tendrás alguien de confianza, amigos cercanos o la familia. En el futuro agradecerán que contaras con ellos. Además gente ajena al proceso a veces tiene ideas interesantes. Si puedes, pide consejo a gente experta, pero recuerda que las decisiones son tuyas, y tienes que creer en ellas.

10) No trates de convencer a quien no tiene criterio. Habrá siempre gente que no entenderá, se dejará llevar, o se posicionará en tu contra por motivos que nunca llegarás a comprender. Recuerda  «El Síndrome de Elvis«: por muchos datos que des, hay gente para la que Elvis sigue vivo, el hombre nunca ha llegado a la luna y las pirámides las construyeron extraterrestres.  Te interesa que la gente que tenga criterio tenga la información y entienda tu toma de decisiones. Respeta que entenderlo no quiere decir apoyarte.

Creo que si estás en un momento duro, realmente duro y sientes un profundo dolor en la espalda, podría resumirte los 10 aprendizajes en 2, para que tengas esperanzas: No hay mal que 100 años dure, y el tiempo ayuda a poner a cada uno en su lugar.

Aunque cada aprendizaje compone un capítulo e iré ampliándolos a futuro me apetecía dar pinceladas para enriquecerlas con vuestros comentarios. Agradeceré si me hacéis llegar casos reales con los que poder ampliar los ejemplos (convenientemente anonimizados).

Recopilando información para documentar el libro he comprobado que este lado oscuro del management no tiene abundante literatura. Al parecer los trapos sucios se lavan en casa y pocos quieren reconocer que no tenían el control en una situación así. Me gustaría  encontrar más ejemplos que servirá para aderezar el texto con casos y anécdotas más allá de los ejemplos personales.

Espero que esta reflexión os sea útil, pero que nunca,nunca , tengáis que veros en una situación en la que aplicar los 10 aprendizajes a la vez.