Por primera vez en muchos años escribo una entrada en mi condición de Ingeniero Industrial, especialidad eléctrica. Aunque mi experiencia profesional ha estado más ligada a la gestión de organizaciones, no he dejado de seguir con interés la evolución de la tecnología en general y particularmente los avances en la generación de energía.

Comencé mi carrera precisamente con el interés de especializarme en energía nuclear, una optativa entonces, y gracias a los esfuerzos de un nefasto profesor cambié de parecer aunque no de interés.

El preludio es para que, spoiler, mi defensa de las renovables, no se vea que viene precedida de ninguna animadversión a otras fuentes de generación que creo que también tiene que forma parte del mix energético. Recomiendo el podcast de Alfredo García “operador nuclear”.

Dicho lo cualo.

Lo que voy leyendo y escuchando en general en los medios obedece claramente a ser un tema muy técnico, que se ha venido sofisticando, mezclado con los mensajes interesados de diversos lobbies, empezando por el nuclear, una oposición al gobierno en formato “cuanto mejor peor”, un gobierno temeroso a dar información sin explicación cerrada, la defensas de intereses particulares para evitar tener que abordar compensaciones milmillonarias y la querencia por teorías conspiradoras de diversos colectivos.

Hay que exigirle al gobierno transparencia y contundencia en la aclaración de las causas de nuestro “fundido a negro” del pasado 28 de abril y poner remedio, explicándonos a los ciudadanos el cómo se va a evitar en el futuro, pero eso no puede ir ligado a tratar de frenar el avance de las fuentes renovables.

Sigo creyendo que nuestro sistema eléctrico es bastante robusto y que no podemos dejar hacer de un suceso único una categoría. Mi porra técnica es que, como sucede cuando hay un accidente de aviación, el sistema de transporte más seguro del mundo, se deberá a un cúmulo de varios factores que se han dado de manera simultanea.

Últimamente se ha hablado mucho de la “inercia” que ofrecen al sistema eléctrico las turbinas para estabilizar la red y la falta de éstas por parte de las renovables como posible causa.

Hay que decir que esa inercia para estabilizar el sistema la pueden ofrecer todo tipo de turbinas, hidroeléctricas, de gas, carbón o nuclear ya que lo único que varía es cómo hago girar una enorme masa ligada a la turbina.

Pero no es la única manera de generar inercia en la red. Las renovables también pueden generar inercia. Como es un artículo sólo para evitar malentendidos comentaré de marea superficial 2 de estos sistemas.

Inversores “Grid Forming

Estos inversores avanzados pueden generar su propia referencia de tensión y frecuencia. A diferencia de los Inversores “grid following” (más baratos claro, y más extendidos) que se dedican a seguir la frecuencia de la red los “grid forming” ayudan a estabilizarla.

Toda instalación fotovoltaica necesita una serie de “conectores” para pasar la energía generada en las placas (corriente continua) a la red (corriente alterna) y es ahí donde se colocan, generalmente en la conexión de varias hileras de paneles.

En el caso de la eólica podría parecer que los rotores ligados a las aspas de los molinos podrían aportar esta inercia, pero por diversos motivos no es así, ya que no se conecta directamente a la red, y por ello también es necesario contar con inversores grid forming en la energía eólica que en este caso puede estar en cada molino o en la interconexión de varios con la red.

Para que el sistema sea aún más robusto, aunque puede tener peor rendimiento si incluimos sus costes medioambientales de reciclaje, es posible incluir en estas conexiones baterías integradas con los inversores grid forming, al inyectar o absorber potencia rápidamente en respuesta a variaciones de frecuencia.

Volantes de inercia y condensadores síncronos

Estas tecnologías mecánicas almacenan energía cinética y pueden liberar o absorber energía rápidamente para estabilizar la frecuencia de la red. Aunque menos comunes que las soluciones comentadas antes, ofrecen una respuesta inmediata y robusta ante fluctuaciones que se pude interconectar con los sitemas de generación eólica o solar. No están muy extendidos, pero es otra solución tecnológicamente viable sin grandes sofisticaciones.

Mi interés es trasladar que no podemos dejar de aprovechar el regalo que nos ha hecho la naturaleza en la península ibérica cuando hablamos de sol y viento para generar energía por visones cortoplacistas o sesgadas que obvian las tecnologías disponibles.

Esto no tiene que impedir que analicemos, mejoremos y tratemos de garantizar la robustez de un sistema eléctrico cada día más sofisticado, imprescindible y sistémico.

Un link también para los muy cafeteros…